Durante los años 30, en París, se rodeó de un círculo de amigos relacionados con la aplicación del arte a variadas disciplinas. Jean-Michel Frank, mueblista y decorador de reconocido prestigio en el París de esos años, congenió mucho con Dalí y juntos desarrollaron varias ideas.
Entre los proyectos realizados por Dalí, se pueden encontrar los muebles de jardín para su casa de Port Lligat, la arquitectura completa del Night Club, para el Hotel Presidente en Acapulco (1957).
En los años noventa un equipo de expertos, capitaneado por Oscar Tusquets, se propuso hacer realidad los muebles que Dalí había dibujado para Jean-Michel Frank, como la silla y la mesa baja Leda, sacados del cuadro “Femme à latête rose” (1935).